“No bajé los brazos”














Tras dos años de ausencia y una lesión previa al Mundial, Juan Figallo volvió a jugar en los Pumas ante Australia. "Fue único", dijo el de Saracens, que sueña con seguir en el radar del seleccionado.

Figallo sufrió una lesión cervical en septiembre de 2013, ante los All Blacks en La Plata, y entre tiempos de recuperación y algún revés estuvo dos años sin vestir la camiseta celeste y blanca.
Ya recuperado y tras haber jugado varios partidos con Saracens, Chipi fue convocado para la preparación previa a la RWC en Australia, pero el 2 de julio una rotura del ligamento lateral interno de la rodilla izquierda en Sydney lo dejó afuera de la cita máxima.
Sin embargo, la baja de Nahuel Tetaz Chaparro le dio a Daniel Hourcade la chance de convocar a un reemplazante y Figallo, que ya se encontraba en condiciones y había ido a alentar a los Pumas como un hincha más, atendió al llamado de emergencia y fue al banco de suplentes ante los Wallabies, ingresando a los 50′ por Ramiro Herrera.
“Por ratitos ahogado, pero para ser mi regreso y en una semifinal, me sentí dentro de todo bien. Estoy algo dolorido pero bien. Fue muy raro, tuve muchos sentimientos encontrados, después de dos años volver a vestir la camiseta celeste y blanca, de pelear tanto contra las lesiones, la verdad que fue único. El lado negativo es que estábamos en una semifinal y perdimos”, evaluó el salteño.
“Desde que me lesioné no bajé los brazos. Allá en Australia me lesioné y mi objetivo era tratar de volver a la Copa Mundial de Rugby. Sabía que se tenían que alinear muchos planetas, era difícil, pero se alinearon, no sé qué pasó. Debutar y volver a jugar otra RWC es muy lindo”.
A los Pumas les queda todavía un último reto y será uno supremo: jugar ante los Springboks por el tercer puesto. Figallo, mientras tanto, tiene la esperanza de poder estar presente en el cierre, el próximo viernes: “tenemos que ver todos los problemas que tenemos con las lesiones, pero yo sigo soñando”.
A partir de 2016, los argentinos que actúen en el viejo continente no serán convocados a los Pumas, pero Figallo anhela que su ciclo con la celeste y blanca todavía no llegue a su fin.
“Tengo contrato con Saracens y con 27 años no cuesta nada soñar. Por mi parte yo no dejo de ser del seleccionado argentino. Si no me llaman, la verdad que duele mucho, pero por mi parte yo voy a seguir entrenando para poder estar acá”, cerró.
*Crédito: Rugby Fun (Foto: Diario La Nación)