El 4 de agosto de 2008 Juan Figallo recibió su primera convocatoria a Los Pumas. Estaba en Salta, recién había llegado de Europa de jugar el Mundial M-20 y Santiago Phelan lo llamó para reemplazar a Juan Gómez para el partido ante los Springbooks en Sudáfrica, como parte de los festejos por el cumpleaños de Nelson Mandela.
Desde esa fecha pasaron 687 días para que su debut con la camiseta de Los Pumas se concrete. Pasaron cuatro convocatorias, un par de concentraciones en Europa y una temporada en el Top 14 francés para que finalmente salte a la cancha a defender los colores nacionales en un test match.
“Estoy feliz por el debut y por la victoria ante Francia. Sin dudas es el debut que uno esperaba. Ganarle a Francia no es cosa de todos los días”, nos dijo ayer Figallo, el jugador del Montpellier francés.
El salteño entró por Martín Scelzo (que juega en el Clermont, campeón del Top 14 francés) a los 56 minutos y se puso al servicio del equipo para que éste no se resienta en su estructura. Robó una pelota vital involucrándose en soledad en un maul francés y de esa acción vino uno de los penales de Felipe Contepomi. Cuando tuvo que arremangarse, derribó todo lo que anduvo cerca.
En el scrum le tocó medirse con un pilar de estatura inferior y eso lo complicó al punto que debió formarse muy abajo para no reiterar las infracciones en las que incurrió Scelzo.
El balance de los 24 minutos que estuvo en cancha con la camiseta número 18 es muy bueno. Jugó en gran nivel y habrá muchas convocatorias de aquí en adelante
*Gentileza: El Tribuno de Salta