Reflexiones de Luis Sacchetti, Dirigente de Jockey de Salta

Opiniones sobre el Pladar, reflexiones de diferentes dirigentes que no dudan en hacer conocer sus criterios y que sirven para enriquecer el debate sobre los puntos en cuestión.
Desde distintos puntos del país hemos recibido con gusto, las reflexiones de diferentes dirigentes que no dudan en hacer conocer sus criterios y que sirven para enriquecer el debate sobre los puntos en cuestión.
Ahora es el salteño Luis Sacchetti , del Jockey Club de Salta, ex integrante del consejo de la UAR y que ha ocupado diversos cargos en distintas comisiones nacionales y/o regionales. Se pronuncia a favor de un amplio debate.
Estas son las reflexiones de Luis Sacchetti:
1) ¿Sirve el sistema de profesionalismo (Pladar) implementado por la UAR ?
Valga recordar, así sea brevemente que el actual Consejo Directivo de la UAR se encontró con este sistema ya “puesto” y que poco podía modificarse so riesgo de atrasar nuevamente los jugosos fondos prometidos por el IRB cuya efectiva implementación, merced a nuestro clásico andar zigzagueante, se venía postergando desde hacía algunos años.
En otras palabras, creo que nuestros actuales dirigentes no tuvieron otra alternativa que seguir adelante con este plan, so riesgo de continuar dilatando la concreción de esa importante ayuda internacional. Dicho esto, pienso que lo que tenemos hoy no es malo. Simplemente es insuficiente y, por lo mismo, absolutamente mejorable. No voy a ser muy original y claramente voy a coincidir con varios preopinantes y con otros muy buenos dirigentes y referentes de distintas uniones grandes y chicas del país, en el sentido que esta preparación física de unos pocos jugadores, por sí sola, sólo sirve como valor agregado para ellos, pero humildemente no creo que genere una repercusión importante en el desarrollo integral de todo el rugby nacional.
Sostengo, en cambio, como muchos, que debe apuntalarse tres tópicos fundamentales: a) La multiplicación por diez de la base de jugadores sometidos a estos regímenes especiales (pagos o no); b) La afectación de personal capacitado para trabajar en las mismas sedes de las uniones y/o ciudades en las que estos se encuentren (tengan o no hiper-gimnasios); y c) La generación de una competencia permanente de los jugadores convocados. Quede claro en todo caso, que lo hasta aquí implementado, como todo comienzo es azaroso y hay que apoyarlo.
2) ¿ Es tentador para los jugadores? ¿ Los deja desarrollar otras actividades?
Indudablemente que sí. Es muy tentador, es enormemente motivador y sí, también, puede limitarlos en el ejercicio de otras actividades. Pero también debe quedar claro que esta es una consecuencia absolutamente propia del profesionalismo: la exclusividad en la dedicación al juego. ¿O no es que el “Pladar” constituye su primera aproximación? Y no digo que esto sea ni bueno ni malo, sólo digo que es así.
3) ¿Cuales crees que son las ventajas y desventajas del sistema?
Esta respuesta se enlaza inevitablemente con la primera. A mi entender, las ventajas se verán claras en la mejor capacitación individual de los jugadores incorporados al Pladar.
Las desventajas, me parece, es que esa mayor capacitación individual de unos pocos, no redundará en un beneficio notorio del juego en general. Pero esto sí podría suceder, como lo dije en 1., si el plan en marcha se lo articula con un esquema de competencia permanente, con la ampliación decidida de la base de jugadores convocados y con la facilitación del acceso geográfico a esa mejor preparación. En materia de competencia, el tema para mi es muy claro. No es razonable que nuestros Seleccionados Provinciales jueguen sólo un campeonato Argentino de 3 o 4 partidos al año.
Debieran tener una competencia cuasi permanente en todas sus zonas. Se podría matizar con seleccionados limítrofes o invitados. Pero lo cierto es que esta mayor actividad, en ventanas y sin descuidar el rugby de clubes, es lo que integraría y justificaría la ampliación de la base de jugadores con planes especiales, reciban o no un pago por ello. Creo, por lo mismo, que sólo afectando mayores recursos a la competencia y no sólo en base a una infraestructura de mega gimnasios, será como crecerá realmente el juego del rugby en el contexto nacional.
4) ¿Esto beneficiará o perjudicará al rugby amateur de los clubes?
Si se cumpliera lo anterior, creo que el sistema beneficiaría notablemente a los clubes amateurs, pues proveería a todos de jugadores más capacitados física y técnicamente.
5) ¿ Es lícito hablar de "rugby amateur" de los clubes cuando muchos a través de trabajos, becas, etc. practican un profesionalismo encubierto?
Yo creo que sí, que el rugby en su inmensa mayoría sigue siendo amateur. No conozco jugadores que cobren y si hay entrenadores que puedan hacerlo (aunque tampoco conozco ninguno), o si algunos jugadores consiguen un trabajo a través del rugby, ello no transforma este juego en profesional.
El 98 % restante de dirigentes, entrenadores y jugadores, no recibe absolutamente nada más que la satisfacción de su relación con el juego.
6) ¿Que pasará con los "jugadores profesionales" que no tengan una cantidad de partidos aceptables, por campeonatos o internacionales?
Sinceramente, no tengo una respuesta para esto. Habrá que ver, como se resuelve la cuestión dentro de nuestro deporte que es muy particular y especialmente contenedor.
7) ¿El rugby es de los jugadores como tanto se pregona?
Quizás sean los jugadores “activos” los que más se divierten, pero todos hemos sido jugadores alguna vez, así que en cualquier función que nos desempeñemos ahora, seguimos siendo dueños del rugby y, al mismo tiempo, somos sus leales servidores.
8) Cada vez se carga más al jugador con costos (apto médico, fichaje, viajes, terceros tiempos, etc). ¿No sería mejor comenzar por este tema para evitar deserciones, como ya las hay en todo el país?
Todo esfuerzo en materia médica es bueno y necesario. También es cierto que hay que tender a que los buenos ingresos que genera y generará el profesionalismo, sirvan también para que, a través de la UAR, se puedan subsidiar los gastos que deben realizar los jugadores en esta materia. Y me refiero sólo a los gastos médicos y a los viajes de campeonato. Los terceros tiempos, los demás gastos de inscripción y cualquier otro gasto tradicional, como camisetas y equipos, deben seguir como siempre ha sido a cargo de los jugadores porque esa es parte de la enseñanza y de la buena filosofía de este juego.
9) ¿No vendría mejor un debate amplio y sincero sobre el tema profesionalismo en la Argentina, entre todos, sin exclusión de nadie?
Sí, por supuesto. Y a partir de los dirigentes de los clubes que, como bien se ha dicho ya en esta página, no siempre comparten el pensamiento de los referentes de sus uniones locales. De todas maneras, creo que habría que buscar la forma de sistematizarlo porque una gran asamblea con dirigentes de todos los clubes del país, no se si sería posible. Lo ideal sería lograr acuerdos regionales de dirigentes de clubes y que estos elijan sus portavoces para un eventual congreso nacional.
* La opinión de Luis, es a título personal.

* Fuente: Tercer Tiempo Rugby