ENTREVISTA DE RUGBY FUN A JUAN FIGALLO

Rugby Fun viajó hasta Salta para conversar con Juan Figallo, que en breve se sumará al Montpellier. El pilar contó detalles de fue su viaje y confesó: “muero por estar en Pumas-Inglaterra. Que mi gente me vea con la celeste y blanca no tiene precio”.
Cordial, simpático y humilde. El pilar salteño Juan Figallo recibe a Rugby Fun en su casa y, claro, el tema vedette del momento es su reciente incorporación al Montpellier francés, club en el que comenzará a repartir tackles a mediados de junio.
“Estoy chocho. Acá, en el rugby salteño, que es amateur, uno siempre está invirtiendo para poder jugar. Y que ahora salga esto y que alguien te financie para que vos te puedas dedicar a entrenar y a jugar, es algo buenísimo”, tira Juan para darle el kick off a la Entrevista de la semana.
¿Cómo surgió la chance de que te mudes a Francia?
Todo empezó en mi último Mundial Juvenil, porque a partir de que tuve una buena Copa del Mundo me convocaron, a último momento, para integrar el plantel de Pumas que se enfrentó ante
Sudáfrica. Y después llegó la gira de Noviembre, que fue espectacular, aprendí a full. Que te entrene un tipo como Fabien Galthie, que es tan perfeccionista, que está en todos los detalles, es algo que no te podés olvidar más. Le saqué el jugo al máximo.

Y ser un Puma te abrió las puertas para que los clubes se comenzaran a fijar en vos…
Claro, ser parte del seleccionado mayor hizo que se dispararan algunas propuestas para jugar en el exterior. Primero, salió la chance de irme al rugby galés…
¿Sabés algo del rugby de Gales?
No, por eso, y pedí muchos consejos. Rorro (Rodrigo Roncero) me ayudó mucho en ese aspecto, porque me dijo que no me apurara y que lo pensara tranquilo. Luego, surgió algo con el Bayonne, pero se cayó…
Y terminó apareciendo el Montpellier…
Sí, a último momento salió lo del Montpellier, pero yo en ese momento estaba jugando
el Argentino y, por suerte, ellos me bancaron hasta que terminara. Después, sí, viajé para allá
¿ Viajaste solo?
No, por suerte me acompañó mi viejo. El pasaje Salta-Buenos Aires lo pagamos nosotros, pero lo cómico es que cuando llegamos a Ezeiza los dos dudábamos si iba a estar el ticket Buenos Aires-Francia. “¿Lo tendrás?” “¿Será verdad todo esto?”, nos preguntábamos -risas-.
Y estaba…
Sí, nos pusimos en frente del mostrador y tiramos un “Figallo”. Y ahí nos confirmaron que estaba. Obvio, nos abrazamos al toque -risas-.
¿Cómo fue el primer día en tu nueva casa?
Después de cómo 36 horas de viaje (Buenos Aires-San Pablo-Toulouse y auto hasta Montpellier), llegamos un lunes a la noche, nos alojamos en el hotel y conocimos al manager del equipo, al que le di todos mis videos.

¿Qué hiciste al día siguiente?
El martes me levantaron bien temprano y me llevaron al club, que de más está decir que es muy lindo, donde estaba entrenando todo el plantel.
¿Practicaste?
Sí, me hicieron hacer una prueba de pique corto y de gimnasio. Y además realicé los exámenes médicos correspondientes. Eso fue martes, miércoles y jueves. Tengo una buena anécdota de cuando esperaba al traumatólogo…
Ahora contala…
-Risas- Y… estaba ahí, sentadito, esperando que me atendiera, cuando de pronto sale Rimas Alvarez, que se había ido de Perpignan a Montpellier para tratarse con este médico. Ahí me dije “qué grosso este tipo” y me quedé charlando con el Flaco.
¿Pudiste hablar con tus nuevos compañeros argentinos
Santiago Bottini y Federico Todeschini ?
Los vi en el club, y el primer día fui a comer con ellos para sacarme las dudas. Se portaron muy bien.
Ya tenés un pie en Francia, se cumplió uno de tus sueños, ¿otro deseo es jugar con los
Pumas ante Inglaterra en Salta?
Ojalá. Me muero, me muero. Que mi gente me vea con la celeste y blanca no tiene precio.


* Fuente: www.rugbyfun.com.at