El seleccionado de la Unión de Mar del Plata vivió su primer gran alegría de la temporada al imponerse al seleccionado nacional de Bélgica por 26 a 10, en un amistoso jugado en la Villa Marista que marcó el cierre de la gira de los europeos (27 en el ranking IRB) por territorio argentino.Más allá de tratarse de un equipo armado para la ocasión y con un entrenador, Carlos López Silva, que no podrá continuar en el cargo (por cuestiones reglamentarias), el combinado marplatense (que estrenó camiseta de color blanca y negra) en líneas generales jugó mejor que su rival y fue un justo ganador.
Los forwards del trébol se bancaron muy bien los embates de los fuertes delanteros belgas y con el correr de los minutos fueron encontrándole la vuelta al scrum y al line, donde habían tenido algunos inconvenientes en el inicio del partido.
Los tres cuartos también cumplieron con su parte. Lo mejor de ellos se vio en la primera mitad, que fue cuando se animaron a jugar desde todos los sectores de la cancha.
Nicolás Prario y Rafael Riego (bastante errático al momento de patear a los palos) se acoplaron muy bien a la línea de Sporting (Zapiola, Iriarte, Meoqui, Díaz y Lanfranconi).
En síntesis, los marplatenses estuvieron a la altura de las circunstancias y se quedaron con más que merecido triunfo ante un seleccionado nacional, nada menos.
Ahora será tiempo de ir pensando en la Unión de Mar del Plata en designar de manera oficial a los reemplazantes de Fabián Maldonado y Marcelo Gilardi.
Como se vio en la tarde de Villa Marista, hay material (léase jugadores) como para armar un buen equipo para el Argentino.
Los que estuvieron y los ausentes (por diferentes motivos) pueden armar una base importante de cara al futuro, pero con un trabajo serio y a largo plazo. Para eso se necesita comenzar a trabajar y del apoyo de todos.
* Fuente: www.tryscrum.blogspot.com